Ana llegó a Estados Unidos hace varios años desde El Salvador. Al principio todo fue incierto, pero logró obtener el Estatus de Protección Temporal conocido como TPS, lo cual le dio la tranquilidad de poder trabajar y vivir legalmente dentro del país. Ana siempre fue muy responsable con sus renovaciones: cada vez que USCIS abría el periodo de reinscripción, ella enviaba sus formularios a tiempo y recibía su permiso de trabajo.
Mientras tanto, Ana trabajaba como asistente médica en una clínica. Su jefe veía su compromiso y profesionalismo, y un día le dijo:
“Ana, necesitamos personas como tú a largo plazo. ¿Has pensado en obtener la residencia permanente?”
Ese fue el inicio de un cambio de vida.
Paso 1 – Mantener la base legal
Ana sabía que lo primero era seguir renovando su TPS. Esa protección era su escudo mientras buscaba opciones más estables.
Paso 2 – Conseguir un empleador dispuesto a patrocinar
Su clínica estaba lista para patrocinarla. El puesto era permanente y a tiempo completo, justo lo que se requiere para un proceso bajo las categorías EB-2 o EB-3.
- En el caso de Ana, el empleo entraba en la EB-3 como trabajadora calificada, porque tenía más de 2 años de experiencia y capacitación en el área de asistencia médica.
- Su primo Luis, en cambio, era ingeniero con maestría, lo que lo colocaba en la categoría EB-2 como profesional con posgrado.
Así, tanto Ana como Luis podían ser patrocinados por sus respectivos empleadores, cada uno en la categoría correspondiente.
Paso 3 – El documento de viaje I-512T
Aunque ya tenían TPS, sus abogados les explicaron que era clave solicitar el permiso de viaje I-512T. Con el permiso, podrían salir brevemente, visitar a sus padres y reingresar de manera legal.
Paso 4 – Reingreso y admisión legal
Después de un viaje corto, al regresar con el I-512T aprobado, inmigración los registró como “admitidos con TPS.”
Paso 5 – El empleador inicia el PERM
El empleador de Ana comenzó el proceso conocido como Certificación Laboral (PERM):
- Solicitó el salario prevaleciente (para asegurarse de que el pago fuera justo).
- Publicó anuncios y entrevistas como parte del reclutamiento obligatorio.
- Presentó el formulario ETA-9089 al Departamento de Trabajo.
Tras unos meses, la Certificación Laboral fue aprobada.
Paso 6 – Petición I-140
La clínica presentó la I-140 a nombre de Ana. USCIS revisó que la empresa podía pagarle el salario ofrecido y que ella cumplía con los requisitos del puesto de trabajo.
Con la aprobación de la I-140, Ana ya estaba a un paso de la residencia.
Paso 7 – Ajuste de estatus (I-485)
Cuando el Boletín de Visas marcó la categoría EB-3 como “current” (actual), Ana presentó el formulario I-485 junto con su esposo y su hijo menor como beneficiarios derivados.
Mientras el caso estaba en proceso, todos recibieron permisos de trabajo y viaje, lo que les dio estabilidad mientras esperaban la decisión final.
Paso 8 – Green Card aprobada
Un año después, Ana y su familia recibieron su green card.
Ya no dependían del TPS ni de un asilo pendiente. Ahora eran residentes permanentes, con la tranquilidad de construir su futuro en Estados Unidos y, eventualmente, poder aplicar a la ciudadanía.
¿Te identificas con Ana o con Luis?
- ¿Tienes TPS vigente?
- ¿Cuentas con un empleador dispuesto a patrocinarte en un puesto permanente y a tiempo completo?
- ¿Tu perfil encaja en alguna categoría: EB-2 (posgrado o habilidad excepcional) o EB-3 (profesional, trabajador calificado o no calificado)?
- ¿Estás dispuesto a solicitar el permiso de viaje I-512T?
Nota: Esta historia tiene fines ilustrativos y su propósito es explicar, de manera general, cómo podría desarrollarse el proceso para obtener la residencia permanente en los Estados Unidos. No constituye asesoría legal ni reemplaza la orientación de un abogado calificado.