Alan Culwell comenzó su carrera como abogado de bienes raíces para un gran bufete de abogados en Indianápolis. Algún tiempo después se le entregó una oportunidad de oro para progresar en su carrera en el campo de la ley de inmigración. Como abogado de habla hispana, Alan pasa gran parte de su tiempo ayudando a los clientes que se han visto obligados a huir de sus países y buscan protección de asilo en los Estados Unidos. En su vida personal, se enfoca en las responsabilidades de la iglesia y la familia. Esta felizmente casados desde hace más de 20 años, él y su esposa son orgullosos padres de seis hijos que les brindan una gran alegría y la garantía de que nunca se aburrirán.
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